De nuevo... en José Gálvez.
Aunque llevamos por aquí unos días, y aun no habíamos dado señales de vida, vamos a intentar ir contando la experiencia que ahora mismo tenemos la suerte de poder vivir... Queremos compartirla con vosotros en la medida de nuestras posibilidades.
Estamos aclimatándonos, en todos los sentidos.
Volver a José Gálvez es encontrarse las puertas abiertas, los abrazos, el cariño y agradecimiento de sus gentes, y sobre todo la disponibilidad de las Hermanas.
Estamos empezando a programar ese compartir que quiere ser este viaje, de esos 15 años de presencia de Karit en la zona.
Es verdad... quizás somos algo peruanos... Somos "de aquí"!!!
Hasta pronto. Un abrazo,
Jose, Maribel y Nieves.
Este es un problema de fondo en cooperación al desarrollo: ¿desde dónde se hace? Si nos situamos en la dicotomía norte-sur, primer-tercer mundo, desarrollados-subdesarrollados, o incluso empobrecidos-causantes del empobrecimiento..., nos situamos mal, a mi parecer. Vosotros nos ofrecéis la verdadera salida al callejón sin salida del falso maniqueismo que muchas veces manejamos: sois de aquí pero viajais allá, tenéis los medios y la formación de aquí, pero os ubicáis allí como uno más, partís de vuestra realidad pero salís de ella para compartir otra muy distinta. Gracias por la lección, gracias por hacernos ver que una ONG como la nuestra tiene sentido desde la horizontalidad del compartir. Gracias por hacer realidad de vida algo tan carmelitano como la fraternidad.
ResponderEliminarHola. Desde el pirineo... Desde el movil...
ResponderEliminarPara transformar...estar, ser con, vivir al lado...
Eso lo haceis vosotros con Karit, en Karit...
Gracias.
Un abrazo.
Perú, representa para Karit un paradigma de transformación... de encuentro... de crecimiento y de vida compartida desde el "aqui" y el "alla". Que hermosa es la fraternidad que sabe traducir en vosotros esa vida, revision y nueva puesta en marcha que se requiere desde esa mirada profunda, critica a atenta a nuestro paso por Perú. Son muchos años de entrega, muchas personas dando la vida y sembrando, muchas contrapartes recibiendo y ofertando lo mejor de si: un poco que ha trasformado mucho y que sin lugar a dudas es el rincon de la sensibilidad, igualdad y lucha por un mundo mas fraterno y justo. GRACIAS porque vosotros con este viaje dan mucho mas de sí mismos: tiempo, jornadas de trabajo, horas y desvelos porque Karit continue su misión de mejorar el mundo. GRACIAS porque sus vidas al servicio de Karit son un don para la Iglesia. GRACIAS porque saben elegir, discernir y crear nuevos metodos y caminos de trabajo. GRACIAS porque saben evaluar proyectos, vida y mision nuestra por esas tierras con ojos nuevos y limpios. GRACIAS porque desde aqui nos sentimos unidos a vosotros. Os queremos y os deseamos llenar el corazon de solidaridad, fraternidad, justicia y paz. En mi oracion y recuerdo constante: Hna. Arlyn
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